La Canción del Legionario || Himno de la Legión || 100 años de la Legión
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- Опубликовано: 13 сен 2024
- Parte del especial 100 años de la Legión.
En agosto de 1954, el diario Abc señaló que poco después de la fundación de la Legión, Millán-Astray le dijo al Comandante Emilio Guillén Pedemonti que no le gustaba que los legionarios cantasen “La Madelón” después del combate: “Quiero un himno viril, que sea expresivo de nuestro modo de ser y en el que se diga como contraseña algo así como «legionarios a luchar, legionarios a morir»”. Un tiempo después, Guillén se reunió con los capitanes Arredondo, Castillo y Ortiz de Zárate y les leyó la letra. Tras escucharla se quedaron emocionados, y uno de ellos comentó: “No le extrañe nuestra sensibilidad. Para nosotros la Legión es algo tan querido, tan íntimamente nuestro, que nos hemos emocionado ‘así’, pensando en lo que va a suceder cuando la conozcan los legionarios si el maestro acierta”.
Al compositor Modesto Romero, conocido por componer cuplés y tangos y al que Millán-Astray había encargado la partitura, también le gustó mucho la letra del nuevo himno. Al día siguiente se sentó al piano a tocar la música. El propio compositor relató así la reacción de los legionarios: “Me abrazaron y el Himno de la Legión se cantó por primera vez con voces roncas y lágrimas de emoción…” Estando en Madrid para recuperarse de una de su primera herida en combate (la sufrida el 17 de septiembre de 1921 en el barranco de Amadí, durante la toma de Nador, en la que fue herido en el pecho), el Coronel Millán Astray hizo llamár al Comandante Guillén y al maestro Romero para que le mostrasen el himno. La canción se interpretó así por vez primera a un pequeño auditorio de heridos en combate que estaban ingresados en el Hospital de San José y Santa Adela. Al terminar, el jefe de la Legión comentó: “Se entonará cuando, a hombros de sus compañeros, los legionarios lleven al legionario muerto. Se cantará en todos los momentos decisivos de alegría y de dicha, así como en el ardoroso combate, sobre todo al lanzarse al asalto”.
Fernández de Latorre señala que el Himno de la Legión fue estrenado ese mismo año por la compañía de zarzuela de Ramón Peña en el Teatro Cervantes de Madrid, interpretándolo el barítono Ulivarri y un coro, con la banda y música del Regimiento Inmemorial del Rey.
Letra:
Soy valiente y leal legionario
Soy soldado de brava legión
Pesa en mi alma doliente calvario
Que en el fuego busca redención
Mi divisa no conoce el miedo
Mi destino tan solo es sufrir
Mi bandera, luchar con denuedo
Hasta conseguir vencer o morir
Legionario, legionario
Que te entregas a luchar
Y al azar dejas tu suerte
Pues tu vida es un azar
Legionario, legionario
De bravura sin igual
Sin en la guerra hallas la muerte
Tendrás siempre por sudario
Legionario
La bandera nacional
¡Legionarios a luchar!
¡Legionarios a morir!
Somos héroes incógnitos todos
Nadie aspire a saber quién soy yo
Mil tragdias, de diversos modos
El correr de la vida forjó
Cada uno será lo que quiera
Nada importa su vida anterior
Pero juntos formamos bandera
Que da a la legión el más alto honor
Legionario, legionario
Que te entregas a luchar
Y al azar dejas tu suerte
Pues tu vida es un azar
Legionario, legionario
De bravura sin igual
Sin en la guerra hallas la muerte
Tendrás siempre por sudario
Legionario
La bandera nacional
¡Legionarios a luchar!
¡Legionarios a morir!
Viva los legionários
¡Legionarios a luchar! ¡Legionarios a morir!
Con dos cojones