HIMNO A SARMIENTO

RESEÑA HISTÓRICA
En 1947 la Conferencia Interamericana de Educación estableció el 11 de septiembre como Día Panamericano del Maestro, en homenaje a Domingo Faustino Sarmiento quien nació el 15 de febrero de 1811 en San Juan, fueron sus padres José Clemente Sarmiento y Paula Albarracín.
De formación autodidacta; en 1842 comenzó a ejercer como Director de la importante Escuela Normal de Preceptores en Santiago, tres años más tarde, el gobierno chileno lo envió a Europa y a Estados Unidos para estudiar sus sistemas educativos.
Fue Ministro hasta que en 1868 fue elegido presidente de la República. Tuvo una administración enérgica y progresista y cuando acabó su época presidencial, volvió a enseñar.
Como Director de Escuelas en Buenos Aires, reorganizó el sistema escolar. Falleció el 11 de septiembre de 1888 en la ciudad de Asunción, Paraguay, a los 77 años de edad.
EL Himno fue solicitado por una comisión cívica que se armó para homenajear a Sarmiento en el año 1938.
El autor de la letra y la música fue Leopoldo Corretjer, un catalán que nació en Barcelona en 1862 y falleció en Buenos Aires en 1941.
Estudió composición e instrumentación con los maestros Sánchez Gabagnach y Gabriel Balart en el Real Conservatorio de su ciudad natal con notas sobresalientes.
En 1880, contando 18 años, ya era Director de orquesta y debutó en el Teatro Principal con la Ópera Lucrecia Borgia.
Fue un activo ayudante en los célebres coros de ese gran maestro catalán que fuera José Anselmo Clavé.
Se trasladó en 1887 a Buenos Aires, donde obtuvo por concurso un cargo de profesor de música en el Consejo Nacional de Educación y fue designado luego inspector de la asignatura música en las escuelas de la ciudad de Bs.As.
Corretjer fue además director de orquesta y autor de muchas obras, entre las que se enuentra el Saludo a la Bandera y algunos tangos.
Se trata del segundo himno escrito en homenaje a Sarmiento aunque es el que se hizo más conocido y se canta desde hace años en los actos escolares de todo el país.
Existe un himno anterior, escrito por Segundino Navarro y Francisco Colecchia, que en la actualidad solamente es interpretado en la Provincia de San Juan, tierra natal de quien fuera su gobernador
LOS HIMNOS A SARMIENTO DESCONOCIDOS
Por:
Redacción Diario De Cuyo
Rodolfo Ferrer, un ex docente y apasionado por buscar partituras y canciones antiguas, encontró tres himnos más que le hicieron en diferentes homenajes y que estaban en el anonimato.
Los dio a conocer justo en el 203 aniversario del natalicio del prócer.
Desde el 27 de agosto de 1904, en San Juan se canta un himno que es diferente al del resto del país. Esa canción tiene letra de Segundino Navarro y la música es de Francisco Colecchia. El ‘nacional’ fue aprobado por el Consejo de Educación creado por el inspector técnico de música Leopoldo Corretjer oficializado en 1943.
Sin embargo, Rodolfo Ferrer, encontró por casualidad la partitura de otro himno a Sarmiento y fue así que tras muchos años de investigación encontró tres himnos más, que se hicieron por distintos homenajes. ‘Uno fue creado a fines de la década de 1930.
La letra es de Eduardo María Ocampo y la música es de Felipe Boero’, dijo Ferrer.
También en el cincuentenario de su muerte se realizó un congreso nacional y como corolario nació otro himno, escrito por Juan Solano Luis y cuya música fue creación de Aguado Aguirre.
En tanto, el quinto himno lo hizo Elmérico Fracassi, un italiano que llegó con su familia al país y que lo distribuyó a través de las filiales del Conservatorio Fracassi en buena parte del país, a principios del siglo pasado.
Ferrer agregó, ‘Les ofrecí a las autoridades estas partituras para que puedan grabar las canciones en un CD y luego distribuirlas en las escuelas.
Creo que es un aporte cultural y un rescate de nuestro patrimonio’.
HIMNO A SARMIENTO
Fue la lucha, tu vida y tu elemento;
la fatiga, tu descanso y calma.
La niñez, tu ilusión y tu contento,
la que al darle el saber, le diste el alma.
Con la luz de tu ingenio iluminaste
la razón en las noches de ignorancia
Por ver grande la Patria tú luchaste
con la espada, con la pluma y la palabra.
En su pecho, la niñez de amor un templo
te ha levantado, y en él sigues viviendo,
Y al latir, tu corazón va repitiendo
¡"Honor y gratitud al gran Sarmiento"!
¡"Honor y gratitud, y gratitud"!
Gloria y loor, honra sin par
para andar entre los grandes,
padre del aula, Sarmiento inmortal.
¡Gloria y honor!
Honra sin par