Es una pena el atropello al que fueron sometidos nuestros pueblos originarios por parte de los invasores españoles. Al punto de obligarlos a olvidar su verdadera esencia. Es muy valioso ver como aún luchan por resistir y no desaparecer del todo. Gracias al yagé y los espíritus guardianes de toda esa sabiduría. Los pueblos originarios y por supuesto el yagé existen mucho antes de Cristo. Ellos tenían el conocimiento de chamanes ancestrales y ahora muchos pueblos tienen como mito de origen del yagé el haber surgido de un cabello de Cristo. Gracias a los taitas y sabedores que aún cuidan y respetan sus tradiciones!.
Muy interesante, felicitaciones. Sólo un par de observaciones: La Iglesia Católica contemporánea como institución no es la misma de los conquistadores ni en su intención ni en su sentido. Por lo tanto, las referencias frecuentes a la misma como un elemento de la colonización es bastante anacrótico. Desde la perspectiva del documental, la Iglesia y el catolisismo es visto como si fuera aún un elemento colonial contempóraneo. Obviamente, en las luchas por la decolonización, lo religioso como elemento cultural está incluido, pero imaginar a los curas párrocos del Sibundoy como siervos de la Corona Española es completamente salido de sentido e incluso del respeto. Segundo, en este ejercicio de analisis de hibridación cultural faltaría sin duda una entrevista a esos mismos pastores de la Iglesia, los curas. Si queremos hacer un analisis, no podemos solicitar información sólo de los taitas, sin conocer la perspectiva de los mismos sacerdotes. Al mismo tiempo, la fe católica de las comunidades indígenas es transparente. Los taitas son concientes de que la religión católica fue impuesta a los ancestros, pero eso no quita que ellos mismos se sientan parte de la Iglesia. ¿Por qué parece tan extraño que se rece y cante en las lenguas ancestrales y no en castellano, cuando Jesucristo habló en arameo y la adaptación al castellano de cosas como liturgia y contenidos viene muchos siglos después? Colombia es una nación pluricultural que debe sentirse orgullosa de que en su territorio se hablen aún y ojalá más y mejor, lenguas ancestrales.
FASCINANTE!
Gracias por compartir estos documentales
Gracias por compartir!!!
Gracias por tan excelente programa. Felicitaciones.
So muy buenas las constumbre de nuestros taiatas
Es una pena el atropello al que fueron sometidos nuestros pueblos originarios por parte de los invasores españoles. Al punto de obligarlos a olvidar su verdadera esencia.
Es muy valioso ver como aún luchan por resistir y no desaparecer del todo. Gracias al yagé y los espíritus guardianes de toda esa sabiduría.
Los pueblos originarios y por supuesto el yagé existen mucho antes de Cristo. Ellos tenían el conocimiento de chamanes ancestrales y ahora muchos pueblos tienen como mito de origen del yagé el haber surgido de un cabello de Cristo.
Gracias a los taitas y sabedores que aún cuidan y respetan sus tradiciones!.
Que alegría me da saber que ahora sí le están dando respeto a nuestros nativos después de tantos años de rechazo por la ignorancia Europea.
POR FAVOR ME PODRÍAN DAR LA DIRECCIÓN AQUÍ EN BOGOTÁ DEL PUEBLO INDÍGENA??? MUCHÍSIMAS GRACIAS ☺️
Muy interesante, felicitaciones.
Sólo un par de observaciones:
La Iglesia Católica contemporánea como institución no es la misma de los conquistadores ni en su intención ni en su sentido. Por lo tanto, las referencias frecuentes a la misma como un elemento de la colonización es bastante anacrótico. Desde la perspectiva del documental, la Iglesia y el catolisismo es visto como si fuera aún un elemento colonial contempóraneo. Obviamente, en las luchas por la decolonización, lo religioso como elemento cultural está incluido, pero imaginar a los curas párrocos del Sibundoy como siervos de la Corona Española es completamente salido de sentido e incluso del respeto.
Segundo, en este ejercicio de analisis de hibridación cultural faltaría sin duda una entrevista a esos mismos pastores de la Iglesia, los curas. Si queremos hacer un analisis, no podemos solicitar información sólo de los taitas, sin conocer la perspectiva de los mismos sacerdotes. Al mismo tiempo, la fe católica de las comunidades indígenas es transparente. Los taitas son concientes de que la religión católica fue impuesta a los ancestros, pero eso no quita que ellos mismos se sientan parte de la Iglesia.
¿Por qué parece tan extraño que se rece y cante en las lenguas ancestrales y no en castellano, cuando Jesucristo habló en arameo y la adaptación al castellano de cosas como liturgia y contenidos viene muchos siglos después?
Colombia es una nación pluricultural que debe sentirse orgullosa de que en su territorio se hablen aún y ojalá más y mejor, lenguas ancestrales.
Siguen siendo obligados a mantener las costumbres religiosas por preservar la paz en el territorio? Grs