Capítulo 1: Cuando nuestro enfoque está desenfocado

Mujeres que Trascienden
Ana: de lo común a lo extraordinario
Aimeé Pérez
Cuando nos aferramos a lo que queremos y no tenemos, y peor aún, que ni siquiera está en nuestras manos hacer nada por cambiarlo, y vivimos en constante enojo, ira, frustración, tristeza, amargura, depresión, resentimiento y/o envidia, todo nuestro entorno se vuelve gris, opaco y todos estos sentimientos nos comienzan a corroer por dentro. Hoy aprenderemos que tener el enfoque correcto hace un mundo de diferencia para poder experimentar un corazón agradecido y lleno de contentamiento con las cosas que Dios ya nos ha obsequiado.