El Chorredero. Las Parras de Martín

El Chorredero es el nombre con el que se conoce popularmente al singular paraje que se sitúa en el río Torrijo a medio camino entre Las Parras y Cervera del Rincón. Se trata de una sucesión de varios saltos o "chorros" por los que el agua se precipita escalonadamente, desde lo alto de la plataforma tobácea hasta la base de los cortados calcáreos.
En el vídeo es fácil advertir visualmente el gran edificio travertínico y tobáceo que se erige, adosado a los abruptos paredones calizos que cierran el fondo del valle. Este gran depósito tobáceo presenta un frente horadado y erosionado, con forma de colada y un aspecto ruinoso y cavernoso, en el que abundan las oquedades y grutas, como las dos de las Brujas y la del Chorredero.
Estas cuevas naturales han sido aprovechadas como apriscos pastoriles por el hombre rural, cerrando con piedra tosca los vanos de acceso y creando amplios y seguros espacios interiores para refugio de animales y personas.
Una de ellas, la más grande y espaciosa, ha heredado su nombre del plano rocoso superior o Era de las Brujas. Dicha era es reconocida por la tradición oral como el lugar donde se conjuraban o se reunían las brujas en otros tiempos más oscuros. A este lugar se puede ascender por una camino de herradura, abierto en la blanda roca carbonatada, que caracolea por la vertiente comunicando todos los apriscos hasta coronar la plataforma rocosa. Allí se puede observar una cruz tallada en el suelo junto a una boda de chimenea procedente del aprisco o cueva de las Brujas.
Aneja al camino discurre una pequeña acequia de riego, excavada a mediados del siglo pasado, para irrigación de los campos de la zona de la Tejería. Escalonadamente, desde lo alto de la plataforma tobácea hasta la base de los cortados calcáreos.
Nota: texto sacado del panel informativo que se puede encontrar en el camino hacia el Chorredero.