"Cuando la casa fue comprada por el político Alvaro Alsogaray, su mujer descubrió la "obscenidades" de la obra de arte y la mandó a rociar con ácido muriático para proteger a su hijita María Julia de tamaña lujuria. Obviamente, el mural no se borró y decidieron cubrirlo con cal" cuenta la revista Susana marzo 2013 en una nota imperdible sobre "la venus roja", Salvadora Botana.
"Cuando la casa fue comprada por el político Alvaro Alsogaray, su mujer descubrió la "obscenidades" de la obra de arte y la mandó a rociar con ácido muriático para proteger a su hijita María Julia de tamaña lujuria. Obviamente, el mural no se borró y decidieron cubrirlo con cal" cuenta la revista Susana marzo 2013 en una nota imperdible sobre "la venus roja", Salvadora Botana.