Nuestras manos son imprescindibles

Los daños en las manos representan el 41% de los accidentes laborales. Pero, ¿todos los accidentes son por condición? ¡No! Son consecuencia de la falta de prevención, capacitación y medidas de seguridad. Son resultado de actos inseguros y condiciones subestándares.
Las manos a menudo son nuestra principal herramienta y tenemos que protegerlas, porque ellas hacen todo: Trabajan, comunican, enseñan.
Si nuestra mente controla las manos, entonces ¿por qué nos accidentamos?
La confianza no nos deja ver el peligro y eso puede traer consecuencias gravísimas.
¡Hay que tener conciencia y control en nuestro trabajo!, donde nuestras manos están expuestas a temperaturas extremas, peligros ergonómicos como movimientos repetitivos y sobreesfuerzo, sustancias químicas, energía eléctrica, peligros mecánicos, herramientas cortantes y equipos con partes rotativas, entre otros.
Cualquiera de esos riesgos sin control, puede causarnos lesiones severas como cortes, amputaciones, dolores articulares, quemaduras, fracturas. ¡Reflexionemos!