Cuidaré de ti Hijo Mío y Nada te Faltará | Palabra de Dios | Un Mensaje de Dios

¿Alguna vez te has preguntado cuánto podría cambiar tu vida si comenzaras cada mañana colocando tus preocupaciones en mis manos, permitiendo que tu corazón descanse en una paz absoluta? Detente un momento... Deja que ese pensamiento repose en tu interior... Permite que mis palabras hablen suavemente a los rincones más profundos de tu alma... Quiero que comiences este día con una mente tranquila, un corazón confiado y una seguridad anclada en mi bondad eterna... Veo tus ansiedades, tus miedos y tus cargas, y estoy aquí para quitarlas de tus hombros cansados... Te invito a caminar conmigo, paso a paso, a respirar la dulzura de mi presencia y a descubrir que nunca estás solo... Hablo contigo ahora con las palabras más simples porque deseo que entiendas lo profundamente que me importas... Quiero que recibas este mensaje sin sentirte distante ni abrumado... Mientras lees, deja que la paz inunde todo tu ser...
Siente la firmeza de mi amor rodeándote, refrescándote y susurrando esperanza en tu espíritu... Cada frase está destinada a acercarte a un estado de calma, para que puedas reconocer que mi corazón late con amor por ti... Hay una dulzura en la quietud, en el suave silencio que invita a tu alma a escuchar... Cuando el ruido de la vida se vuelva demasiado fuerte, cuando las dudas y las incertidumbres llenen tu mente, simplemente detente... Permite que tu corazón recuerde que estoy aquí, ofreciéndote mi consuelo... No estás perdiendo el tiempo cuando eliges estar en silencio ante mí... Al contrario, te estás regalando el descanso en mi cercanía... En ese lugar de quietud, sentirás mi compasión y entenderás mis promesas... No estás abandonado ni jamás lo estarás... En tus momentos de cansancio, cuando tus pensamientos se arremolinan y no puedes decidir qué camino tomar, levanta la mirada y susurra mi nombre... Deja atrás la idea de que debes resolver todo por tu cuenta...