¡Bienvenidos, Ciudadanos El Bosque!

Todos pasamos por ahí. La sensación de estar perdido en un espacio gigante que desconocemos, el temor de entrar y salir de donde queramos sin pedir permiso o la adrenalina de sentir que no estamos donde deberíamos a la hora indicada.
La libertad que da el primer día de universidad, ese lugar nuevo desde el cual, con emoción, empezamos a dar los primeros pasos del resto de nuestra vida al lado de los maestros que marcarán el resto de nuestros días.
Empezamos a crear un código que solo nosotros entendemos, un grito de independencia que viene acompañado de una gran responsabilidad. Ya no estamos en el colegio, respondemos por nosotros mismos y nuestros compromisos aumentan.
Nuestra identidad va más allá del carné que acredita nuestros derechos como estudiantes y nos compromete con nuestra comunidad. Nos identificamos en los lugares en que nos rodean, nos reflejamos en el amor por una comunidad que nos importa y nos respaldamos unos a otros para hacer de nuestro campus algo parecido a una pequeña ciudad, con ritmos propios y latidos que surgen en el día a día de sus habitantes.
¡Bienvenidos!