SI MI PUEBLO SE HUMILLARE (5/4/2020)
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- Опубликовано: 7 апр 2020
- En tiempos de crisis, de COVID-19 lanzamos un desafío a la fe, como pueblo de Dios debemos humillarnos, doblar rodilla, ayunar e interceder como un sólo cuerpo para provocar un milagro en nuestra Nación.
Todo lo que no se usa, se pierde. El privilegio de predicarle al mundo se perdera si no se usa.
Humillarse delante de Dios es renunciar a la maldad, al pecado, al camino de la herejia, para caminar con Cristo en obediencia a la voluntad de Dios revelada en sus mandamientos.
Mientras el mundo entero no se arrepienta de sus herejias hechas ley, el castigo de Dios no se va a detener. El mundo esta siendo destruido debido a sus herejias impuestas como ley.
Leer Isaias 24: 5.
Amén Pastor 🙌
Q bueno q predica con la verdad y autoridad espiritual,Q Dios Padre continue guiandolo varon del Altisimo....!!
Ese dios se debe escribir correctamente en mayúscula Dios.
Amén amén 🙌
Gracias partor por su palabra usted tiene toda la razón
Para que Dios pelee por nosotros, (Exodo 14: 14), primero hay que pelear por su reino. El Salmo 2 advierte a los gobernantes del mundo que si rompen las leyes divinas sufriran cosas terrorificas debido a la ira de Dios. Y lo describe en mas detalle en Isaias 24: 5.
La iglesia solo tiene potestad para gobernar sobre si misma. A los de afuera, los juzgara Dios. Pero esto no quiere decir que la iglesia se lava las manos y no hace nada por cambiar el mundo. La iglesia tiene que alcanzar al mundo, tiene que predicarle al mundo. El que no pueda obligar al mundo a cambiar, el que no pueda legislar sobre el mundo, no le quita su obligacion de predicarle al mundo. Hay que interceder por el mundo en oracion. Pero tambien hay que predicarle. Hay que dejar de predicarle al coro y comenzar a predicarle al mundo. Cristo mando ir por todo el mundo predicando. No dijo que le predicaramos solo al.coro de la iglesia.
Mientras las iglesias cristianas continuen predicandole solamente el coro de la iglesia, y no al mundo perdido, el mundo no se arrepentira de sus pecados y sufrira tremendos y destructivos juicios de Dios. Y la iglesia sufrira las consecuencias porque aunque no es del mundo, vive en el mundo.