Según Miguel Ángel Carrillo Barrios, a finales de los años 70, principios de los 80, sobre la séptima a la novena sur sobre la primera poniente, muchos indígenas fueron ocupando espacios donde se localizaba un asilo de ancianos que posteriormente se convirtió en Centro de Rehabilitación para Enfermos Alcohólicos. Entonces el centro de abastos adoptó el nombre de: “Los Ancianos”. Al poco el lugar se había convertido en un auténtico tianguis sobre ruedas y los puestos de cualquier tipo de vendimias, se establecían fijamente.
Según Miguel Ángel Carrillo Barrios, a finales de los años 70, principios de los 80, sobre la séptima a la novena sur sobre la primera poniente, muchos indígenas fueron ocupando espacios donde se localizaba un asilo de ancianos que posteriormente se convirtió en Centro de Rehabilitación para Enfermos Alcohólicos. Entonces el centro de abastos adoptó el nombre de: “Los Ancianos”. Al poco el lugar se había convertido en un auténtico tianguis sobre ruedas y los puestos de cualquier tipo de vendimias, se establecían fijamente.