Campos madres de vinífera en Viveros Villanueva

Lo peculiar de nuestros viñedos está en el origen, en su trazabalidad, ya sean material base, certificado o estándar. En todos los casos, con trabajos de autocontrol y vigilancia de los responsables de Sanidad Vegetal.
Nuestros campos madre necesitan de una arquitectura ordenada y equilibrada, que les permita un vigor suficiente pero moderado y que, mediante su buena disposición para generar corredores de aire, prevengan y favorezcan un control esmerado de las plagas.
Todo está pensado para que la planta, además de las uva características de cada se, pueda ofrecernos yemas de sarmientos sanos y bien agostados. Esta es nuestra prioridad.
Las selecciones clonales nos aseguran máxima sanidad inicial y una replica homogénea de las características agronómicas y enológicas, campos en los que la madre de todos los individuos es la misma. En el resultado final siempre mediará la influencia de cada terruño, pero si la selección está bien estudiada la tendencia que marcan los datos será fiable.
Las selecciones masales estándar también garantizan sanidad, pero la multiplicación es más dispar, mayor cuantos más individuos multiplicamos. Esta diversidad, antes defecto, es ahora también virtud y del agrado de quienes buscan perpetuar selecciones propias.
Miguel Lucea Villanueva, ingeniero responsable de los viñedos de Viveros Villanueva Vides, nos cuenta como procura incidir en esmerados métodos de tratamiento y que las yemas a multiplicar sean elegidas de entre sarmientos principales bien limpios, los mejor lignificados de cada cepa y preferiblemente de la parte intermedia, siempre que sea posible.
Todas las atenciones son pocas, ya que redundarán en un mejor resultado en el vivero y, lo más importante, serán el origen de vuestros grandes viñedos.
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