Mateo 13:9-15 El que tenga oídos, que oiga. Los discípulos se acercaron y le preguntaron: -¿Por qué hablas a la gente en parábolas? Él respondió: -A ustedes se les ha concedido conocer los misterios del reino de los cielos; pero a ellos no. Al que tiene se le dará más y tendrá en abundancia. Al que no tiene hasta lo que tiene se le quitará. Por eso les hablo a ellos en parábolas: Aunque miren, no vean; aunque oigan, no escuchen ni entiendan. En ellos se cumple la profecía de Isaías: “Por mucho que oigan, no entenderán; por mucho que vean, no comprenderán. Porque el corazón de este pueblo se ha vuelto insensible; se les han tapado los oídos y se les han cerrado los ojos. De lo contrario, verían con los ojos, oirían con los oídos, entenderían con el corazón, se arrepentirían y yo los sanaría”
Tan sencillo es el evangelio dado para creer. Muy buena
Mateo 13:9-15
El que tenga oídos, que oiga.
Los discípulos se acercaron y le preguntaron:
-¿Por qué hablas a la gente en parábolas?
Él respondió:
-A ustedes se les ha concedido conocer los misterios del reino de los cielos; pero a ellos no. Al que tiene se le dará más y tendrá en abundancia. Al que no tiene hasta lo que tiene se le quitará. Por eso les hablo a ellos en parábolas:
Aunque miren, no vean;
aunque oigan, no escuchen ni entiendan.
En ellos se cumple la profecía de Isaías:
“Por mucho que oigan, no entenderán;
por mucho que vean, no comprenderán.
Porque el corazón de este pueblo se ha vuelto insensible;
se les han tapado los oídos
y se les han cerrado los ojos.
De lo contrario, verían con los ojos,
oirían con los oídos,
entenderían con el corazón,
se arrepentirían y yo los sanaría”