“PREPARÁNDONOS PARA LA PERSECUCIÓN” | Pastor Adrian Rogers. Predicaciones, estudios bíblicos.
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- Опубликовано: 24 авг 2024
- “PREPARÁNDONOS PARA LA PERSECUCIÓN” | Pastor Adrian Rogers. Predicaciones, estudios bíblicos. Tema 8, Serie “LAS LLAVES DEL REINO”.
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Esto cambio mi perspectiva de la persecución. Tengo apenas dieciséis años, y me da mucho miedo la persecución, nunca tuve una vida interesante, siempre he estado aquí en mi hogar, más nunca he tenido ningún daño a grandes niveles. El Señor me encontró, lo creo y sé que tengo una nueva vida. Aún así, me es difícil afrontar dolor físico por Jesús. El Señor nos ayude
Que belleza de predicación.
Hermosa llana de sabiduría y entendimiento.
Que hombre si fue extraordinario lleno del precioso ESPÍRITU SANTO.
El Evangelio santo lleno de PODER, estamos comprometidos a extender estas predicaciones como está.
Que el Señor se siga glorificado en este hombre.
Que la palabra corra y sea glorificada como dice la PALABRA.
Bendiciones y gracias y gracias por todo y por permitir y transmitir y no ocultar tremenda predicación.
Que el Señor los guarde ahora y siempre.👍
Saludos Gustavo Toledo por aquí prédicacion perfecta
Las doctrinas son los nuevos ídolos del pueblo cristiano.
En estos últimos tiempos se está cumpliendo la profecía del apóstol Pablo que vemos en 2a Tesalonicenses capítulo 2 versos 1 al 3 donde enseña que la venida del Señor Jesucristo y nuestra reunión con él, no ocurrirá sin que antes venga la apostasía y se manifieste el hombre de pecado el hijo de perdición. Acerca de la apostasía que se menciona en ese pasaje, podemos decir que ya se está cumpliendo. Porque a la luz de la palabra de Dios se decir que la apostasía ya se está cumpliendo, la Iglesia ya está en apostasía. Y cuando se dice que la Iglesia ya está en apostasía se quiere decir que todas las iglesias y todos los grupos cristianos ya están en apostasía.
Una de las evidencias de que todas las iglesias y los grupos cristianos ya cayeron en apostasía es el hecho de que en estos últimos tiempos los cristianos se fueron tras unos nuevos dioses, los cuales son las doctrinas.
Pero veamos primero, a qué nos referimos cuando hablamos de las doctrinas.
Cuando hablamos aquí de las doctrinas, nos referimos a todas esas opiniones o posturas teológicas que hay en el cristianismo respecto a distintos temas de la fe. Por ejemplo, en las iglesias consideradas de sana doctrina hay dos opiniones diferentes respecto al tema de la salvación. Por un lado, está la doctrina calvinista, o doctrina de seguridad de salvación, la cual enseña que una vez que hemos creído en Jesucristo ya somos salvos y que esa salvación no se puede perder bajo ninguna circunstancia. Por otro lado, está la doctrina arminiana, la cual afirma que la salvación es condicional y que por tanto sí se puede perder. Esto es básicamente lo que enseñan esas dos doctrinas; y al igual que éstas, existen en la Iglesia muchas otras doctrinas, las cuales también se oponen y se rechazan mutuamente creando división en el cuerpo de Cristo.
Entendiendo entonces qué se quiere decir cuando se habla de las doctrinas, podemos entender que una doctrina no es más que la opinión que un creyente tiene respecto a algún tema de la biblia. El problema que hay con las doctrinas, es que los cristianos de este tiempo son capaces de torcer las Escrituras, o inclusive hasta llegan a desechar la biblia con tal defender cada uno su propia doctrina
De hecho, cuando los pastores programan en las iglesias algún estudio acerca de cualquier tema de la biblia, direccionan dicho estudio para que sus conclusiones concuerden con la doctrina que ellos ya tienen acerca del tema que se está estudiando. Por ejemplo. Cuando un pastor calvinista programa un estudio de la biblia acerca del tema de la salvación, direcciona ese estudio de tal manera que las conclusiones concuerden con la doctrina de seguridad de salvación. De igual manera hace el pastor que predica la doctrina arminiana. Y así sucesivamente lo hacen todos los pastores para sostener cada uno la doctrina que defiende. O sea, no estudian la biblia para crecer en el conocimiento de Cristo, sino para reforzar las doctrinas que ya tienen.
Y esto ocurre no solamente con los pastores, sino también con todos los cristianos en general. Cada uno es más fiel a sus doctrinas que a la biblia.
¿Y cómo fue que los cristianos cayeron en esta nueva idolatría?
La razón por la cual los cristianos se convirtieron en seguidores de doctrinas, es porque los pastores y maestros del pueblo cristiano no entendieron que la labor más importante que ellos debían hacer era conducir a los creyentes a la madurez, para que ya no fueran niños fluctuantes llevados por todo viento de doctrina. Porque sabemos que la madurez consiste básicamente en que el creyente ya ha establecido una relación personal e íntima con el Señor Jesucristo en la palabra y está siendo enseñado directamente por él. O sea, el creyente que ya ha alcanzado madurez, es aquel ya no depende más de los ministros para seguir creciendo en la fe, sino que ha aprendido a buscar al Señor en el secreto, para que sea él quien le explique las Escrituras y le aclare todas las dudas. Pero el creyente inmaduro es aquel todavía depende de los pastores para que le expliquen la biblia, para que le den consejos, para que le den sermones, para que le aclaren dudas etcétera.
Entonces, como los pastores no condujeron a los creyentes a la madurez, éstos se quedaron como niños fluctuantes llevados pordoquiera de todo viento de doctrina. Y los pastores, no solamente faltaron a su deber más importante que era conducir a los creyentes a la madurez, sino que se dedicaron a predicar doctrinas, defendiendo unas y atacando otras lo cual hizo que la Iglesia se dividiera y cayera en apostasía.
Todo lo anterior explica por qué los cristianos de este tiempo hicieron de las doctrinas sus nuevos dioses. Porque como bien lo enseña Efesios, cuando el creyente no avanza a la madurez se queda como niño fluctuante por lo cual es llevado de todo viento de doctrina. Por lo que el creyente inmaduro es fácil de ser seducido y arrastrado en pos de aquel ministro que logra convencerlo de que él si enseña la doctrina correcta.
Es más, los ministros de este tiempo, no solo no cumplieron el deber más importante para el cual fueron puestos, sino habiéndose dedicado a predicar doctrinas, defendiendo una y atacando otras, por esto mismo cumplieron otra palabra del apóstol Pablo en la cual profetizó que se levantarían hombres que hablarían cosas torcidas, para arrastrar tras sí a los discípulos. Porque para esto es que los pastores están usando las doctrinas, para arrastrar tras sí a los creyentes. Porque, como ya dijo, cuando el creyente es inmaduro es presa fácil de aquellos que quieren ganar seguidores. Pues una vez que en una iglesia logran convencerlo de que ahí si se enseña la doctrina correcta automáticamente queda atrapado en ese lugar.
Todo este mal ha venido a la Iglesia porque la tradición les ha hecho creer a los cristianos que es normal quedarse toda vida dependiendo de los ministros para que les den consejos, para que les expliquen la biblia, para que les den sermones, para que les aclaren dudas etcétera.
O sea, la tradición de los hombres les ha hecho creer a los cristianos que es normal quedarse toda la vida como niños fluctuantes.