Lamentablemente en México no dan buen servicio de calidad humana menos en el IMSS ya que llevo más de 3 años con dolores de cabeza, mareos y fatiga derivado a una clasificación del cerebro. No me quisieron dar incapacidad permanente mencionando que así puedo trabajar cuando ni mis labores cotidianas puedo hacer para mí ha sido difícil y doloroso. Aunado a esos padecimientos que tengo empecé con falla de la visión de mi ojo derecho y tendré que ir de nuevo al IMSS pues un neurólogo privado cobra un ojo de la cara lo hacen por lucro y no por ayudar a l@s pacientes como yo.
Gracias pero los neurologos cobran un ojo de la cara, y mi familia apenas tenemos lo basico. Dios tendra misericordia de nosostros. Pues somos una familia grande. Y nada es gratis. En Dios pongo mi fe en el nombré del Señor Jesucristo.
Gracias a Dios no sufro de nervios ni ansiedad, y los doctores no conocen nuestro cuerpo nosotros nos conocemos mejor que los doctores. Y por suouesto Nuestro Creador nos conoce. Espero y mi familia podamos salir a atendernos en otro lugar. Primero Dios.
Muchas gracias por está información tan valiosa y bien explicada.
Lamentablemente en México no dan buen servicio de calidad humana menos en el IMSS ya que llevo más de 3 años con dolores de cabeza, mareos y fatiga derivado a una clasificación del cerebro.
No me quisieron dar incapacidad permanente mencionando que así puedo trabajar cuando ni mis labores cotidianas puedo hacer para mí ha sido difícil y doloroso.
Aunado a esos padecimientos que tengo empecé con falla de la visión de mi ojo derecho y tendré que ir de nuevo al IMSS pues un neurólogo privado cobra un ojo de la cara lo hacen por lucro y no por ayudar a l@s pacientes como yo.
Gracias pero los neurologos cobran un ojo de la cara, y mi familia apenas tenemos lo basico. Dios tendra misericordia de nosostros. Pues somos una familia grande. Y nada es gratis. En Dios pongo mi fe en el nombré del Señor Jesucristo.
En el hospital general de México no cobran las consultas medicas y los estudios algunos son gratis
Gracias a Dios no sufro de nervios ni ansiedad, y los doctores no conocen nuestro cuerpo nosotros nos conocemos mejor que los doctores. Y por suouesto Nuestro Creador nos conoce. Espero y mi familia podamos salir a atendernos en otro lugar. Primero Dios.