Si bien no hay registros oficiales, se estima que al momento de la inundación había alrededor de 7 mil cuerpos descansando en bóvedas, nichos, tierra y osario. Unos 25 años después, cuando las aguas se retiraron, en las sepulturas quedaban la mitad de ellos y la mayoría sin identificar.
Ante la presión y desesperación popular, se contrató una empresa para que extrajera los féretros, con seis buzos que recorrían las profundidades del cementerio inundado. Debían romper las bóvedas bajo el agua, extraer los cajones y cargarlos en una barcaza. Los que estaban enterrados, se decidió, no serían tocados. #abandoned #casa #history #explore #argentina #urban #urbex #mexico #españa