En este video podrás ver la montaña rusa de emociones que tiene una competición para nosotros, y lo mucho que nos apoyamos para poder sacarla adelante.
Después de años siendo uno de los puntales base para este proyecto, Alberto, nuestro copiloto, decide dejar el asiento del miedo por motivos laborales.
Solo puedo estar agradecido de haber tenido la oportunidad de compartir tantos buenos momentos y de haber aprendido de los malos, de ser mis ojos más allá de la siguiente curva, del siguiente rasante, de las derechas o izquierdas buenas que me decías "no levantes", de tu confianza en tramos de “top speed” y ni titubear lo más mínimo con las notas. Gracias por todo, gracias por ver…